Mensagrama
El conocimiento de las plantas
medicinales, saber el lugar donde están, cuidarlas, escogerlas que no estén muy
secas, ni muy tiernitas, que estén en su punto para que alivie a una persona
con determinado problema de salud. Por su sabor, su olor, textura, forma y
tamaño la población ha ido determinando los variados e interesantes usos que se
hacen de la flora medicinal tomando en cuenta el papel que juegan las fuerzas
elementales como: el sol, la luna, las estrellas, el agua, el fuego. Todo descansa
hoy en una cultura que nos da identidad y forma original de ser nicaragüenses.
Nuestra Fundación CECALLI
tiene el rostro de quienes la crearon, rostro de parteras, curanderos,
promotoras, promotores, brigadistas, enfermeras. Rostro campesino surcado de
arrugas de agua, pelo de montaña, sonrisa de quebrada olorosa a madroño y
toritos.
Jóvenes, adultos, ancianos, mujeres campesinas y mujeres de
barrio conforman nuestra estructura organizativa, fuerza granítica que avanza
impetuosa en el desarrollo comunitario, consolidando poco a poco todo un
trabajo gigantesco en función de mejorar la salud, el medio ambiente y el nivel
de vida de nuestro pueblo.
“La vida está hecha de momentos”
Momentos buenos y malos, pero sin lugar a dudas eso es
la vida. Ambos son necesarios y formativos si los sabemos aprovechar e
interpretar.
¿Cuáles pesan más en
nuestra vida?
¿Cuáles nos dejan huellas más profundas?
Los momentos malos (llamados así o, simplemente creemos que
son malos) porque nos someten a prueba tanto en nuestra condición de mujer o de
hombre; nos dan experiencia, la fortaleza necesaria para luchar en la vida;
pero nos enseñan a andar, nos cincelan a golpes, a hachazos, nos dan razón de
ser, nos aumentan la capacidad de trabajo, nos hace circular la sangre a borbollones,
nos invitan a actuar en razón inversa de como lo estábamos haciendo.
Los malos momentos son la necesidad diaria en que el pueblo
pobre se debate, sin más horizonte aparente que una miseria mayor, a corto,
mediano y largo plazo; pareciera que somos hijos de malos momentos y que vamos
a vivir y morir en malos momentos ¿Será posible eso?
¿El patrimonio del
pueblo son los malos momentos?
¿Tenemos o no tenemos
derecho a otros tipos de momentos?
“Si no somos capaces
de transformar lo que está a nuestro alcance no vale la pena haber nacido.”